La incertidumbre del entorno representa una contingencia
importante para la estructura organizacional y comportamientos internos.
Una organización en un entorno determinado puede ser
administrada y controlada de manera diferente de una organización en uno
incierto en lo referente a sus puestos y departamentos, a su diferenciación
organizacional, integración, sus procesos de control y la planeación y
pronósticos para el futuro Las organizaciones necesitan un ajuste correcto
entre su estructura y entorno.
Puestos
y Departamentos: a medida que se incrementa la complejidad y
la incertidumbre en el entorno externo, también lo hace la cantidad de puestos
y departamentos dentro de la organización cada sector en el entorno requiere un
empleado o departamento que se responsabilice de él.
Amortiguamiento
(disminución, redacción) e interconexión de fronteras (limites, barrera) El
método tradicional para hacer frente a la incertidumbre del entorno ha sido el
establecimiento de departamento de amortiguamiento. El propósito de las
funciones de estos es absorber la incertidumbre del entorno.
Diferenciación
e integración: La diferenciación organizacional implica a
“las diferencias en las orientaciones cognitivas (conocido) y emocionales
(entusiastas, apasionados) entre los directivos en distintos departamentos
funcionales (prácticos) y la diferencia en la estructura formal (serio entre
los departamentos. Cuando el entorno es complejo y cambia rápido, las
divisiones organizacionales se especializan en un nivel más alto para manejar
la incertidumbre en un sector externo.
Análisis
comparativo de los procesos: en entornos muy cambiantes,
las organizaciones internas eran mucho más espontaneas, con flujos más libres y
adaptables. Con frecuencia las reglas y las regularizaciones no estaban
escritas o si lo estaban, eran ignoradas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario